Acentuación gráfica de los monosílabos
Los monosílabos, es decir, las palabras que tienen una sílaba, por regla general no llevan tilde. Ejemplo: fe, pie, sol, can, gran, vil, gris, da, ves, fui, ruin, bien, mal, no, un.
Constituyen una excepción a esta regla general los monosílabos que tienen tilde diacrítica.
Tilde diacrítica
Se llama tilde diacrítica al acento gráfico que permite distinguir palabras con idéntica forma, pero que pertenecen a categorías gramaticales diferentes.
Tilde diacrítica en monosílabos.
Muchos de los usos de la tilde diacrítica en español afectan a palabras de una sola sílaba:
Otros casos de tilde diacrítica
Demostrativos.
Los demostrativos este, ese y aquel, con sus femeninos y plurales, pueden ser pronombres (cuando ejercen funciones propias del sustantivo)
Solo cuando en una oración exista riesgo de ambigüedad porque el demostrativo pueda interpretarse en una u otra de las funciones antes señaladas, el demostrativo llevará obligatoriamente tilde en su uso pronominal. Así, en una oración como la del ejemplo siguiente, únicamente la presencia o ausencia de la tilde en el demostrativo permite interpretar correctamente el enunciado:
¿Por qué compraron aquéllos libros usados? (aquéllos es el sujeto de la oración)
¿Por qué compraron aquellos libros usados? (el sujeto de esta oración no está expreso, y aquellos acompaña al sustantivo libros).
Interrogativos y exclamativos.
Las palabras adónde, cómo, cuál, cuán, cuándo, cuánto, dónde, qué y quién, que tienen valor interrogativo o exclamativo, son tónicas y llevan tilde diacrítica. Introducen enunciados directamente interrogativos o exclamativos:
¿Adónde vamos?
¡Cómo te has puesto!
¡Qué suerte ha tenido!
¿De quién ha sido la idea?
No hay comentarios:
Publicar un comentario